Planta que en estado salvaje prospera más en climas cálidos, no tolera mucho el invierno, por sus bajas temperaturas. Como planta de acuario su forma cambia sustancialmente teniendo las hojas sumergidas una forma lanceolada y ligeramente redondeada en la punta, no superan los 1,5cm de longitud y crecen a pares en sus delgados tallos.
La planta será en principio de color verde intenso y verde oliva que puede llegar a ser rosaceo o incluso rojo intenso en las partes superiores si le ofrecemos buena iluminación. A diferencia de otras plantas de origen palustre, la Rotala Rotundifolia no emergerá al alcanzar la superficie del acuario, sino que, debido a sus delgados tallos, se doblará en la superficie y es probable que aparezcan nuevos brotes en nudos de la parte doblada.
Este mismo comportamiento lo presentan sumergida, al "acostar" el tallo para enraizar directamente y sacar tallos de los nodos del tallo acostado, haciéndola de forma rastrera. Esto lo hace la planta para expandirse más rápidamente. Puede darse con luz alta o media. Acostumbra a perder hojas de la parte inferior del tronco si la iluminación que les llega no es suficiente, por lo que intentaremos evitar ponerla a la sombra de otras plantas y que se haga sombra a si misma.
Planta que habitualmente se coloca en grupos de varios tallos, muy utilizada para la creación de macizos mediante la poda. Se suele utilizar como foco visual en acuarios plantados ya que por su coloración intensa llama la atención. En paisajismo se utiliza en las partes posteriores en acuarios pequeños, o medias/posterioras /posteriores en acuarios grandes, debido al tamaño de sus hojas ya y a la altura que puede alcanzar.
Tipo: Tallo
Origen: Asia
Velocidad de crecimiento: Medio
Altura: 15cm - 30cm o más
Luz necesaria: Poca
CO2: Bajo